10 cosas que debes saber antes de tu primera clase de surf
Antes de embarcarse en su primera clase de surf y cabalgar su primera ola, es esencial conocer algunos consejos básicos para garantizar una experiencia segura y agradable. Familiarízate con las normas sobre equipamiento, seguridad y mucho más.
Uno de los deportes oceánicos más divertidos es sin duda el surf. Puede parecer fácil surcar las olas con elegancia, pero enseguida aprenderás que es cualquier cosa menos eso.
Roma no se construyó en un día, y todos estos surfistas geniales y despreocupados empezaron igual que tú. Con estos consejos y trucos, podrás pasar más tiempo sobre la tabla surfeando que en el agua arrasando. Y para poner en práctica después los siguientes consejos, reserva una primera clase de surf en uno de los mejores lugares para hacer surf para principiantes.
Saber nadar
Igual que no hay humo sin fuego, ¡nunca habrá surf sin conocimientos previos de natación y del medio acuático! Si le da miedo el agua o no se siente cómodo en ella, le aconsejamos encarecidamente que abandone la fantasía del surf, cueste lo que cueste. Tendemos a tener certezas infundadas como: "los surfistas tienen tablas para flotar, ¿no?". ...pues no, spoiler alert, ¡la tabla no siempre estará a tu lado durante una sesión!
Imagina por un momento que tu leash (la cuerda que une la cola de la tabla a la pierna del surfista) se rompe o se desprende... éste es sólo un ejemplo, pero habrá muchos casos en los que tendrás que arreglártelas sin este accesorio. Así que, ante todo, tienes que saber nadar bien, porque, por desgracia, ¡la braza no te servirá de nada frente a las corrientes y las olas!
Prepárese para contener la respiración
Otro consejo de esta lista de cosas que hay que saber antes de la primera clase de surf es el control de la respiración. Un buen surfista sabe nadar y también aguantar la respiración bajo el agua. Es inevitable que te encuentres bajo las olas después de un wipe-out. Por ejemplo, cuando no haces pop-up, la fuerza de las olas puede empujarte hacia abajo. Muchos lo comparan con estar en una lavadora en modo centrifugado. Puede ser bastante desorientador, pero es importante no dejarse llevar por el pánico y dejar que el agua te mueva hasta que pase la ola.
Aquí es donde entra en juego el aguantar la respiración. Intenta respirar hondo antes de entrar en una ola (o si sospechas que estás a punto de hundirte) para tener suficiente oxígeno. Es normal y forma parte del proceso de aprendizaje. Sólo estarás bajo el agua unos segundos, así que aprende a relajarte y a aceptarlo. En el peor de los casos, puede que tengas que esperar dos olas si las series están muy juntas. Como mucho, sólo pasarás 30 segundos bajo las olas, así que mantén la calma y volverás a la superficie antes de que te des cuenta.
Elija el lugar y el momento adecuados
Practicar surf implica elegir los lugares y las condiciones meteorológicas adecuados para tu nivel de habilidad. Para hacerlo con éxito, tendrás que entender cómo afectan las mareas a un lugar, la fuerza del oleaje y el tamaño de las olas.
Los lugares para surfear se consideran point break, reef break o beach break. Si estás empezando, el mejor tipo de lugar es un point break. Aquí las olas se mueven más despacio y son más suaves. Las rompientes de playa suelen ser más duras y empinadas, y las rompientes de arrecife están justo por encima de corales o rocas sumergidas. Cuando te caes (algo inevitable para todo el mundo), golpear el arrecife es muy doloroso. Si se siente perdido con todos estos términos específicos, las expresiones y el vocabulario más comunes del surf le serán de gran ayuda.
Las mareas también son importantes a la hora de elegir un lugar. Compruebe las horas de marea y el tamaño del oleaje antes de ir. Verás que donde un día puede haber olas de 2 metros, otro día en el mismo spot las olas son de sólo 50 cm. Puedes consultar esta información en varios sitios como Windguru o Magicseaweed.
Si todavía no está seguro después de consultar estos sitios web y quiere saber si es el momento adecuado para surfear, fíjese en el line-up y si está vacío. Si es así, probablemente se deba a que las condiciones no son favorables, por ejemplo, demasiado viento o corriente o poco oleaje. Si no, no dudes en preguntar en la tienda de surf local, ellos te lo dirán todo sobre los horarios de las mareas y cuándo ir a surfear.
No vayas a surfear solo
Una de las 12 cosas más importantes que debes saber antes de tu primera clase de surf es que nunca debes surfear solo. Asegúrate de salir siempre con un amigo. Debe ser alguien que sepa nadar. Además, elige un lugar donde haya torres de socorristas cerca. En caso de caída o lesión, es posible que necesites ayuda para volver a la orilla sano y salvo.
Una situación potencialmente peligrosa es la llamada corriente de resaca. Si un surfista se cansa y se encuentra atrapado en una corriente de resaca, puede ser arrastrado mar adentro. La mejor técnica para escapar de una corriente de resaca es dejarse llevar por la corriente sin oponer resistencia, al tiempo que se intenta atraer la atención de los socorristas o de otros surfistas en la formación. También puedes intentar nadar hacia la playa en diagonal, en lugar de hacerlo en línea recta.
Una cosa es segura: el océano puede ser peligroso, y nunca hay que subestimar el poder de los elementos. Para evaluar la situación, utilizamos el dicho "en caso de duda, no salgas a remar".
La madre naturaleza siempre tiene la última palabra
Antes de probar el surf, es importante reconocer el poder del océano. Las olas son una fuerza con la que hay que contar y es improbable ganar contra esta enorme potencia.
Pero, por suerte, el océano acepta que nos guste jugar en él, siempre que lo hagamos con respeto. Aprender a surfear te enseña a analizar y comprender tu entorno. No hay dos olas iguales, así que tienes que ser capaz de adaptarte constantemente a las condiciones cambiantes del océano.
El surf no es simplemente otro deporte, exige humildad y paciencia con la madre naturaleza. Al fin y al cabo, ¡las olas siempre tendrán la última palabra!
Saber elegir el traje de neopreno y la tabla adecuados
Otro factor a tener en cuenta en la lista de cosas que hay que saber antes de tu primera clase de surf es la tabla y el traje de neopreno adecuados. Esto puede influir en la rapidez con la que aprendes a surfear. Deberás elegir la longitud, la anchura y el peso adecuados. Por ejemplo, si tu tabla de surf es demasiado pequeña o ligera para tu peso específico, no te mantendrá a flote.
También es importante elegir el estilo de tabla adecuado a tu nivel de habilidad. Cuando estás aprendiendo, la mejor opción es una tabla larga. Los principiantes lo pasarán muy mal intentando ponerse de pie sobre tablas cortas de alto rendimiento. Pueden parecer chulas, pero son para surfistas avanzados que pueden ponerse de pie sobre las olas mientras duermen.
Si estás leyendo este artículo, es probable que seas nuevo en el surf. Lo ideal es que tengas una tabla de alrededor de 8 pies, preferiblemente de espuma, epoxi o materiales plásticos. Cuanto más avances, más corta será tu tabla. Las tablas cortas simplemente no tienen mucha flotabilidad y requieren una técnica refinada y pericia para dominarlas. Si empiezas a surfear con una tabla pequeña, acabarás desanimándote rápidamente y se perderá toda la diversión de la primera sesión.
Cuando se trata de trajes de neopreno, es igual de importante lo que elijas. Elige el grosor adecuado (3/2 mm, 4/3 mm, 5/4 mm...), según la temperatura del agua. El ajuste debe ser ceñido para que no entre agua. En invierno, opta por escarpines, guantes y capucha si quieres aguantar más de quince minutos en el agua helada.
No olvides encerar tu tabla
Sin duda querrás encerar tu tabla antes de salir a remar. Ten en cuenta la temperatura del agua a la hora de elegir el tipo de cera. Si empiezas a frotar cera de agua fría en tu tabla en agua caliente, sentirás que se derrite incluso antes de meterte en el mar.
Una vez que hayas comprado la cera adecuada (en los paquetes se indica la temperatura a la que se puede utilizar), coloca capas de cera en los lugares donde estarán tus pies e incluso tus manos, esto te proporcionará una estabilidad extra en tus pop-ups.
El calentamiento marca la diferencia
Aunque no veas a todo el mundo calentando, es una muy buena idea preparar el cuerpo para el esfuerzo físico al que lo someterás. Unos buenos estiramientos y ejercicios para abrir las caderas y los hombros, un poco de footing rápido por la playa, y estarás listo para empezar.
Igual de importante es que no olvides beber agua e hidratarte antes de la sesión, es esencial para tu rendimiento, ya que probablemente pasarás al menos dos horas al sol gastando mucha energía. Y hablando de sol, ¡ponte crema solar para evitar quemaduras!
Dominar la técnica del pop-up
Antes de salir a remar por primera vez, es recomendable que dediques algún tiempo a practicar la técnica de despegue en tierra firme. Practica colocándote tumbado sobre la tabla. Alinea los dedos de los pies en el extremo posterior de la tabla con el pecho presionado firmemente hacia abajo. Comprueba si tienes los pies "normales" o "tontos". Esto se refiere a qué pie colocas naturalmente hacia delante en cualquier tipo de tabla que montes.
Una vez que estés en el agua, tendrás que remar tan fuerte como puedas, mientras te mantienes firme sobre la tabla. Después de uno o dos segundos, intenta elevarte. Al mismo tiempo, te elevarás empujando con las manos, que permanecerán alineadas con el pecho. A continuación, enderécese deslizando las piernas hacia delante por debajo del cuerpo. Apóyate en el pie e intenta no apoyar la rodilla en la tabla (esto crea mucha inestabilidad).
Una vez que hayas conseguido ponerte de pie, utiliza los brazos para mantener el equilibrio y para ayudarte a girar y cambiar de dirección. Además, ten en cuenta que la dirección en la que mires dictará hacia dónde vas, así que no mires a tus pies. Si lo haces, pronto acabarás cayendo de cabeza. Cuanto más practiques esto dentro y fuera del agua, más natural te resultará.
Respetar las normas de prioridad y el lugar
Otro consejo importante es aprender a hacer surf donde sea más apropiado. Por ejemplo, debe evitar aprender a hacer surf en una zona designada para nadar. Los niños suelen nadar y jugar aquí, por lo que querrás evitar esta zona, por si tu tabla sale volando.
El surf es en gran medida su propia cultura, y hay reglas en las que alguien debe aprender a comportarse. Por ejemplo, ser educado y cortés, saludar y disculparse si se corta el paso a otro surfista. Las normas son similares a las de un coche y a las de la carretera.
También está la cuestión de la prioridad. Te habrás dado cuenta de que hay muchos surfistas en el agua. Los surfistas que esperan una ola están en lo que se llama "la cola". Sólo uno de ellos tendrá prioridad para surfear la ola entrante, y es la persona que está más cerca del lugar donde rompe. Si no eres tú, debes respetar al otro surfista. Comprueba atentamente en qué dirección rompe la ola, a la izquierda o a la derecha. Si no hay ningún surfista en ella, puedes remar hacia ella.
Otra regla tácita es que los locales tienen prioridad. Los surfistas son muy territoriales y no les gusta que los turistas les quiten las olas. Por lo tanto, siempre es buena idea dejar que los locales tengan más prioridad.
Reserva tu primera clase de surf
Ahora que ya conoces estas reglas que debes saber antes de tu primera clase de surf, te deseamos mucha suerte. Recuerda, ¡lo importante es divertirse! No te asustes si no te pareces a Kelly Slater la primera vez. Ten en cuenta que cada uno aprende a su propio ritmo.
Consulte todas nuestras actividades de surf para reservar su primera clase de surf. ¡El océano te espera!