Que hacer en Reserva Natural de Fynbos de la Montaña de Ceres

Ceres, que debe su nombre a la diosa griega de la agricultura, se encuentra a apenas hora y media en coche de Ciudad del Cabo y es famosa por ser una de las tierras más fértiles de toda Sudáfrica.

Hace años, esta región servía de puerta nororiental al paso de Michell, una antigua ruta de carretas que unía Ciudad del Cabo con Johannesburgo. Hoy en día, el valle de Ceres es conocido por su fruta de hoja caduca, aguas de manantial y zumos de fruta. Llena de paisajes encantadores y únicos, la región es accesible principalmente por pintorescos puertos de montaña.

Ceres se beneficia de un clima mediterráneo gracias a su altitud. Durante el invierno, es normal que nieve y las temperaturas medias mínimas sean de 2 C. ¡Los residentes de Ciudad del Cabo acuden en masa a Ceres durante el invierno para divertirse en la nieve! Aunque se puede esperar un invierno frío, durante el verano la ubicación de la región provoca un clima cálido y seco.

La región cuenta con tres importantes reservas, la Reserva Natural de Fynbos de la Montaña de Ceres, desconocida en su mayor parte, la Reserva Privada de Caza de Inverdoorn y la Reserva Privada de Matroosberg. Inverdoorn es una reserva de caza de 10.000 hectáreas que alberga búfalos, rinocerontes blancos, jirafas, cebras y una gran variedad de antílopes que podrá ver sin peligro durante un safari. Acercarse a estas increíbles bestias es una experiencia única en la vida.

La Reserva Natural Privada de Matroosberg son casi 1.000 ha de caprichosas montañas. Su punto más alto es el Pico Matroosberg, con 2247 m que durante el frío invierno se cubre de nieve. El paraje se vuelve perfecto para recorrerlo en un vehículo 4x4.

Las características geográficas de la región también ofrecen excelentes opciones de senderismo. Partiendo de Prince Alfred's Hamlet, en las montañas Skurweberg, podrá disfrutar de los campos cubiertos de fynbos en una ruta de 2 a 4 horas. Otra opción popular es alcanzar la cima de las montañas Matroosberg.

Probablemente la mejor forma de empaparse de toda la belleza de la región sea pedaleando. En los alrededores de Eselfontein se pueden hacer 4 rutas ciclistas diferentes. Estas rutas permiten a los ciclistas descender por hermosos paisajes forestales. Senderos como Death Drop, Red Bull Hill y Dead Man Walking ofrecen subidones de adrenalina a los valientes y atrevidos.

La guinda del pastel es una excursión en tirolina rodeada por las rocosas montañas Skurweberg, que forman un telón de fondo perfecto para una aventura divertida y llena de adrenalina. Las tirolinas tienen una longitud total de 1,4 km en 8 toboganes diferentes.

La Suiza sudafricana se extiende sobre un fértil valle que ofrece paisajes de granja para todos los aventureros que buscan una experiencia diferente.